miércoles, 13 de mayo de 2015

Homilía del VII Domingo de Pascua

Seréis mis testigos

"La cincuentena pascual nos permite centrar la atención en el Misterio de la Muerte y Resurrección de Jesús rompiendo con la visión cronológica (cuarenta y cincuenta días), para fijarnos en la Unidad del Misterio de la Pascua como acontecimiento indivisible, que supera las categorías temporales y nos sitúa en una dimensión nueva.

No estamos realmente ante un calendario festivo, sino ante un acontecimiento que revela tres aspectos de la Pascua, ocurridos el mismo día, como expresa Juan en su Evangelio: Jesús resucitado sube al Padre y derrama el Espíritu sobre los suyos. Así lo había anunciado y cumple su promesa. Hoy celebramos el segundo aspecto del misterio pascual: la Ascensión.

Parece que conviene no romper el sentido unitario de la Pascua aunque por pedagogía separemos los aspectos, la intención es ahondar más y mejor en el Misterio de la Muerte y Resurrección De este modo podremos descubrir mejor cómo se llena de sentido nuestra vida y cómo somos unidos a la Misión de Jesús a favor de toda la humanidad."

Comunidad de Predicadores de Almería
Convento de Sto. Domingo (Almería)

No hay comentarios:

Publicar un comentario